martes, 18 de octubre de 2011

SINDICATOS EN LA HISTORIA NACIONAL



Este mes, abordamos la cuestión histórica del Sindicalismo en nuestra país.

Pese a lo que sea hoy, la historia, nuestros orígenes y nuestra identidad está determinada por un ser “colectivo”,  somos lo que podemos construir entre todos, aunque a veces, haya grupúsculos que intenten lo contrario. 

Una imagen cotidiana de los trabajadores organizados.
 
La aparición de los Sindicatos en la Argentina, esta precedida por un complejo proceso de organización que pasa por distintos tipos de organizaciones que viene desde la época colonial (y de la edad media también).

Hoy es habitual la utilización de los términos gremios-sindicatos como sinónimos que describen una misma forma organizativa, pasando por alto que cada palabra, encierra la plenitud de dos mundos culturales completamente distintos.

Por gremio, se designaban las corporaciones de oficios que se crecieron al amparo de las construcciones “cristianas” medievales, en las cuales los trabajadores de un mismo oficio (albañiles, maestros, etc) resguardaban su conocimiento y los comunicaban a los nuevos integrantes del gremio.

Por su parte, los sindicatos, son organizaciones más bien vinculadas con el proceso de desarrollo industrial y directamente creadas para la promoción de derechos y bien común ya no de un oficio, sino de una clase de trabajadores nacida con la revolución industrial y la promoción del comercio europeo en nuevos mercados continentales.

¿Hay continuidad o ruptura entre los gremios y los sindicatos? La respuesta no esta exenta de problemas, aunque podría decirse que los que se vinculaban por “oficios” pasaron a relacionarse a través de actividades o ramas industriales, albergando muchas y muy variadas profesiones u oficios en la tarea de producción, por lo que precisaron de una nueva organización que les permitiera garantizar el resguardo de sus derechos y la promoción del bien común.

No obstante, huelga aclarar que este es un proceso que se da más bien con esta forma en Europa, después de 1750 y que en América, producto de la división internacional del trabajo, se manifiesta con particularidades espaciales.

LA PRIMERA ORGANIZACIÓN

La finalización de disputas internas entre unitarios y federales, trae aparejada la consolidación del Estado (1853-1862), cada día más desplegado por el “territorio” nacional y el desarrollo de actividades de índole privada que promueven la aparición de los primeros trabajadores del “proto capitalismo” argentino.

De la mano del desarrollo nacional, se van nucleando criollos e inmigrantes que identificados en las mismas necesidades y empleados, dan los pasos necesarios para instituir orgánicas que auspicien su defensa frente al avance del capital, aliado estratégicamente con la elite gobernante de nuestro país.

En este contexto se da la aparición de lo que algunos consideran la primera organización de trabajadores que se dio en la Argentina: la Sociedad Tipográfica Bonaerense. Una Mutual de buenos oficios que albergaba en su seno a todos los trabajadores relacionados con la imprenta. Asimismo, en paralelo, se da origen a la Sociedad de Zapateros de San Crispin, otra organización de las mismas características armada en defensa de un oficio particular.

Con el paso de la Generación del 80´ y la impronta de progreso agroexportador e inmigrante, las mutuales comienzan a dar paso a los Sindicatos, promovidos desde los nuevos residentes que venían de Europa con mayores niveles de experiencia en lo que hacía a la vida “gremial-sindical” de los trabajadores. Fue así que la defensa de los oficios, dejó su paso a la defensa de actividades mucho más amplias e inter vinculadas, aunque (todavía) de forma precaria.

“El Movimiento Obrero estaba en gestación, con una incipiente organización en el país y con algunos espacios más consolidados en países de mayor grado de desarrollo industrial.”

Fueron dándose entonces, los primeros pasos de lucha, concretándose, por ejemplo, un fuerte huelga gráfica en septiembre de 1878 y una de comercio en 1881.

En otros lugares. Para ese entonces, se iría gestando, lo que bien puede considerarse como el acontecimiento fundacional de la identidad de clase moderna: el 1º de mayo y la lucha por las 8hs (hecho que merece una cartilla aparte).

El resto, será historia para contar en las sucesivas ediciones de estos folletos.


EN DEFINITIVA

Los sindicatos han surgido como una expresión necesaria de una clase social sometida al imperio de las elites dominantes económica, social, política y culturalmente.

Han sido la genuina construcción de resistencia, en un momento, y de avance en materia de conquistas que permitieron que los trabajadores y su familia, vivan mucho mejor, en otro. Hoy su rol, puede estar desdibujado, más por la imagen caricaturesca que toman muchos de sus dirigentes que por acciones mismas en el marco gremial.

Por eso para nosotros es importante indagar en nuestros orígenes, muchas veces, la desmemoria se cura, con un simple análisis de lo que hemos sido, como puntapié para dar forma, a lo que queremos ser.